Espectacular jornada de nieve es el resumen de lo acontecido este pasado domingo. Un día radiante, el cielo completamente despejado, ni gota de aire, y encima, nieve hasta los ojos, ¿ qué más se puede pedir para una jornada de nieve?, pues si, de eso pudimos disfrutar.
Desde La Bañeza salimos con la intención de subir al pico Fontún situado en Villamañín, pero la parada obligada en el restaurante Ezequiel para desayunar un buen café con leche mojando un poco de chorizo, al llegar pudimos observar que la nieve en esta zona había desaparecido y nos vimos obligados a cambiar el rumbo de la jornada.
Por la cercanía decidimos ir al pueblo de Viadango de Arbas para subir a la estación invernal de Pajares, ya en el pueblo y nada más bajar del autobús pudimos calzar las raquetas de nieve y no apearlas en todo el día, menudo a tragantón de raquetas, aunque en la zonas superiores el hielo nos obligó a echar mano de los crampones, por seguridad.
La ruta empieza en una pista forestal a la parte final del pueblo, que va remontando por el valle de Viadangos, es cómoda por la pendiente tendida y va transitando por un entre sombras gracias al pinar en las faldas de la sierra del Cueto, poco a poco fuimos ganando altura hasta el final del valle donde viramos 180º para superar las ultimas rampas un poco más duras con dirección al Cueto Negro (1.862 m) objetivo principal de la jornada. Sobre las 14:00 estábamos comiendo tranquilamente mientras observábamos a los esquiadores como subían plácidamente en el forfait de la estación (como nos gusta sufrir a los montañeros). Reposada la comida vimos muy asequible la subida al Pico Celleros (1.864 m.) por el cordal, no lo dudamos y nos encaminamos hacia su cima. Foto grupal de rigor y retorno al pueblo pero en esta ocasión sin contemplaciones, montaña abajo gracias a las buenas condiciones de la nieve, los que conocéis esas sensaciones me comprenderéis, y esto es todo amigos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario