C.D. Salamanca 9 – La Pole-La Bañeza F.S. 1
Por el C.D. Salamanca comenzaron: Holguera, Raúl, Nacho, Adrián y Sergio. Después: Cabezas, Ratero, Dani, Alberto, Mohssin y Álvaro. Por La Bañeza arrancaron: Michi, Belver, Arce, Vicente y Mati. Después: Luis Felipe, Lucho, Pablín, Unai y Sergio.
Polideportivo de La Alamedilla en Salamanca con cerca de 300 espectadores. Árbitros: Israel Barroso, Jesús Montero y José Juan Santero (Crono). Goles: 1-0 min. 7 Ratero; 2-0 min. 11 Sergio; 3-0 min. 22 Sergio; 4-0 min. 25 Ratero; 5-0 min.26 Ratero; 6-0 min. 27 Alberto; 7-0 min. 31 Adrián; 7-1 min. 35 Belver; 8-1 min.35 Álvaro; 9-1 min. 39 Raúl.
La Pole-La Bañeza F.S. se plantó en el centro de Salamanca el domingo pasado con varias novedades en sus filas y con la esperanza de traerse algo positivo de tierras charras, pero la cruda realidad hizo desvanecer de un plumazo esas aspiraciones. No fue bueno el dicho de A entrenador nuevo, victoria segura, y los pupilos de Mario Soto se vinieron de vacío y con una contundente derrota que les deja terceros por la cola y a expensas de recibir la visita el próximo sábado de un hueso siempre duro de roer, el Cabezón de Valladolid. El conjunto bañezano, dirigido desde la semana pasada por el ex jugador Mario Soto y con un nuevo fichaje tras la incorporación de Pablo Belver, no comenzó mal el partido en el pequeño campo de La Alamedilla. Los jugadores salieron más confiados que en anteriores partidos y contuvieron las acometidas locales durante los primeros compases. Un despiste en el minuto 7 propició el 1-0, que vino muy seguido del segundo de los salmantinos que abría una pequeña brecha en el marcador. No obstante, los morados también tuvieron sus opciones y el duelo en ese instante estuvo bastante igualado. Con ese 2-0 se llegó al descanso. Pero lo cierto es que en el segundo tiempo los nuestros se diluyeron como una aspirina en un vaso de agua visto lo visto sobre la pista desapareciendo del partido. El equipo hizo aguas en defensa y en ataque se mostró incapaz de hacerle daño al rival, por lo que los goles locales fueron cayendo uno tras otro bajo los cánticos de una afición salmantina que apoya sobremanera a sus chicos. En conclusión, borrón y cuenta nueva, así como ánimo al nuevo míster que sin duda tiene mucho trabajo por delante.
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